En los tiempos de este libro Altísimo vivía en medio de su pueblo en el desierto y habían varias reglas establecidas para poder entrar en su presencia, literalmente. Dios exigía santidad en la adoración y en el diario existir.Los hijos son una herencia del Señor , los frutos del vientre son una retribución. Como flechas en las manos del lian